Traducción al español de “Blockchain África 2021: Charles Hoskinson’s keynote speech”
transcripción del discurso de apertura pronunciado por Charles Hoskinson, Director Ejecutivo [CEO] y Fundador de IOG, en la Conferencia Blockchain África 2021, publicado por IOG el 21 de marzo de 2021.
A continuación se presenta una transcripción ligeramente editada del discurso de Charles Hoskinson del 18 de marzo de 2021 en Blockchain África 2021, en el que se esboza la visión de IOHK para África.
Video doblado al español por @CardanoCastellano
África y el tema de la banca y los no bancarizados, el tema de la identidad económica, son algo muy cercano a mi corazón. Cuando hace más de 10 años utilicé Kiva ¹, una plataforma de préstamos de microfinanciación, se despertó en mí una larga trayectoria de lectura de libros como El banquero de los pobres, de Muhammad Yunus ², y empecé a debatir sobre la cuestión: ¿por qué el mundo tiene sistemas financieros fracturados? y ¿por qué las personas, sin culpa alguna; al perder en la lotería geográfica, nacen en sistemas que las mantendrán perennemente pobres, independientemente de lo mucho que trabajen o de la calidad de su carácter?
Esto me condujo al espacio de las criptomonedas. No me importaban demasiado las discusiones sobre proof-of-work [prueba de trabajo] o proof-of-stake [prueba de participación], tampoco cómo funcionaban las transacciones de Bitcoin o cualquiera de estos detalles. Era la utilidad del sistema para llevar la identidad económica a los miles de millones que no la tienen, lo que me interesaba. Supe que este concepto de descentralización, este concepto de tener una blockchain que sirve como un lugar para marcar el tiempo, para auditar cosas, un lugar para gestionar la confianza entre las personas que no confían entre sí, era realmente algo revolucionario y mágico. No obstante, se trataba de un gran invento que venía sin manual de uso, y sin pilas incluidas. Durante los 10 años que han transcurrido desde que me incorporé al espacio de las criptomonedas, ha sido mi misión en la vida construir sistemas que tengan la capacidad de actuar como columna vertebral de los servicios públicos y las estructuras sociales que permitan una gran fusión de los mercados del mundo.
El objetivo es que los más pobres disfruten de los mismos sistemas financieros que los más ricos. Es una idea sencilla, pero en la práctica, casi imposible de lograr con los sistemas predominantes. Y lo más importante de nuestro trabajo ha sido el protocolo Cardano. Empezamos en 2015 a construir el protocolo Cardano específicamente para descubrir cómo dar cabida a este concepto de identidad económica, con el objetivo de construir aplicaciones que fueran igual de útiles para alguien en un sótano de Estados Unidos que para un pastor en Senegal.
Capacidad para construir
Comprendimos también que, además de hacer una gran ciencia e ingeniería, nos llevaría bastante tiempo averiguar cómo desplegar estos sistemas en el mundo en desarrollo. Lo cual implicaba que teníamos que trasladarnos físicamente a esos países. Y así, en 2017, cuando ya éramos un poco más maduros como empresa, establecimos oficinas en Addis Abeba (Etiopía). Creamos extensiones en Ruanda y Uganda, y encontramos grandes socios. Además, comenzamos a explorar lugares como Mongolia, Georgia y naciones sudamericanas también. Estábamos todos unidos por una causa y un propósito comunes. ¿Cómo podemos hacer que un sistema funcione de abajo a arriba en lugar de arriba a abajo? ¿Cómo podemos dar a la gente una identidad propia y ponerla en control de su propio dinero, de su propio futuro, y darle una plataforma sobre la que construir?
¿De qué manera podríamos permitirles asegurar el crédito y conservar la propiedad? Y protegerlos y afianzarlos mediante seguros y otros productos. Los cuatro años de viaje, desde el establecimiento de esa oficina en Etiopía, han dado unos frutos increíbles. Primeramente, hemos tenido la increíble oportunidad de conocer a muchos líderes mundiales que están alineados con muchas ONG y organizaciones benéficas que están directamente alineadas con nuestro objetivo. Además, hemos podido formar a talentos locales y contratar a personas de la zona. Han hecho de esto su incansable misión vital. En muchos casos lo han hecho con pocos recursos y, en muchos casos, expuestos a burocracias indiferentes o a la corrupción, al despilfarro, al fraude y al abuso, y a simples contratiempos.
Transformando vidas
Hemos sido testigos de nuestros propios contratiempos. En algunos países en los que hemos elegido estar ha habido disturbios. En algunos de los países que hemos elegido para trabajar han cambiado los regímenes. Por consiguiente, las cosas que creíamos que iban a suceder antes han tardado un poco más. No obstante, este año estamos en la cúspide de acuerdos e iniciativas que llevarán a millones de usuarios al ecosistema de Cardano a través de asociaciones público-privadas. ¿Y qué significa eso? En realidad… ¿Qué significa eso?
Pues que un gran grupo de personas, por primera vez en su vida, tendrá una identidad digital que podrá vincularse a una billetera digital. Que también puede estar vinculada a sistemas de pago, que también pueden estar vinculados a la propiedad. Así podrán disfrutar de ricos metadatos y otras cosas por el estilo. Es la meta más alta, porque si podemos lograr estas cosas, entonces significa prácticamente una nueva economía construida sobre la gran licuación de billones de dólares de riqueza. Verán, la realidad es que África no es un continente pobre y las naciones africanas en conjunto no son pobres.
Se encuentran, más bien, en una situación en la que tienen un enorme potencial y una riqueza real, pero esa riqueza es inalcanzable debido a los malos sistemas y a la dificultad para globalizar los Estados nación del continente. Se trata de una tremenda oportunidad. Lo cierto es que cuando se mira al futuro, no se quiere ir a donde está la pelota ahora, se quiere ir a donde estará la pelota. Es decir, quieres ir a donde las economías van a crecer más rápido y ver las mayores oportunidades.
De China a África
En los años 80 vimos esto con el auge de China. En aquel entonces, la gente de Wall Street, Londres, Japón y otros lugares tenía la idea de que China era una nación muy pobre con muchos problemas sistémicos. Pero los actores muy capacitados que realmente entendían hacia dónde se dirigían las cosas, comprendieron que los cambios en esos sistemas habían llegado a una posición en la que China se convertiría en pocas décadas en una de las naciones más ricas y poderosas del mundo.
Lo mismo ocurre con la demografía de África, con la generación que se hará cargo del continente. Se puede ver que el 70% de los etíopes tienen 30 años o menos. Muchos de ellos crecen con un teléfono móvil en la mano, con acceso a Internet. Disponen de acceso a la educación, gracias a los MOOC ³, gracias a YouTube y otras plataformas gratuitas. Y así el puente del capital humano ha ocurrido. Y tienes un grupo de personas que son tremendamente ambiciosas e impacientes, y no tolerarán la burocracia del pasado y no tolerarán los pecados del pasado. El sistema que se interponga en el camino del progreso pronto se derrumbará. Como consecuencia, ese vacío es un mercado para nuevos sistemas.
Una nueva generación
Mi país cuenta con una infraestructura social de billones de dólares. En Estados Unidos, para nuestros mercados financieros, para nuestro sistema legal, para cada cosa, desde cómo funciona nuestra asistencia sanitaria, hasta cómo morimos, hay una ley o un reglamento o alguna burocracia que se interpone. En muchos casos, esto sostiene y estabiliza nuestra sociedad, sin embargo, también nos hace menos resistentes, menos adaptables, y frenan el progreso. Y dificultan la capacidad de avanzar hacia el futuro cuando existe el potencial de sistemas completamente nuevos, que en muchos casos son órdenes de magnitud más eficientes a un coste mucho menor. Eso va a suponer una enorme ventaja competitiva para las naciones que adopten primero los nuevos sistemas. Los primeros países que celebren elecciones nacionales en línea que sean creíbles, libres, justas y auditables serán probablemente naciones africanas. Serán los primeros países en disponer de una identidad y una economía digitales de principio a fin.
Ello brinda un gran potencial a las naciones africanas, no a Alemania, ni a Francia, ni a Gran Bretaña, ni a Estados Unidos, ni a China, ni a Japón. Se trata de un buffet libre de innovación, progreso y nuevos sistemas, y mi industria, la industria del blockchain, está integrada con él. ‘Nuevo’ es lo que hacemos. Hallamos formas de crear confianza entre personas que no confían entre sí. Hallamos formas de cambiarlo todo, desde la política monetaria hasta el concepto de identidad, pasando por el concepto de propiedad.
Así que construimos infraestructuras en Etiopía, entre otros lugares del continente. Y lo hicimos a sabiendas de que las infraestructuras se utilizarían para dar servicio a grandes acuerdos gubernamentales. Así que adoptamos el modelo push, en el que empujamos estas cosas a los ciudadanos de los países, y comenzamos una campaña sistémica de innovación en todo el continente. Otra magia de Cardano es que trae consigo un sistema de financiación llamado Catalyst. Hoy, en este momento al precio vigente de ada, más de un cuarto de billón de dólares, 250 millones de dólares, se encuentran disponibles para subvenciones. Para quienes deseen construir infraestructuras, aplicaciones y servicios y productos en el ecosistema de Cardano.
África en la vanguardia
Pensamos y aspiramos a que, en los próximos cinco años, un porcentaje significativo de los empresarios que desplieguen infraestructuras lo hagan con una visión panafricana. Puede ser un sistema de préstamos entre iguales; puede ser un sistema de remesas; una red de cajeros automáticos; acceso básico a Internet; un micro ISP. Puede que sea la generación de energía. Y no se trata sólo de un objetivo: es algo en lo que estamos invirtiendo mucho, con socios como ICE Addis, que nos da acceso a los emprendedores. Y en los próximos cinco años, en más de 25 países de África, probablemente nuestro personal sobre el terreno pasará de las docenas a los cientos, si no a los miles. Y en vez de tener una sede, es probable que tengamos cuatro o cinco sedes que cubran el continente.
Como ejemplo, en Ghana hemos emprendido una campaña para aumentar los recursos, el acceso y el personal. Asimismo, intentaré hacer lo mismo en lugares como Ruanda. En cada lugar al que vamos hemos encontrado una actitud acogedora, y mucha gracia e inteligencia. Un ejemplo: el Primer Ministro de Etiopía es un criptógrafo. Un presidente de más de 70 años gobierna mi país. A Etiopía la gobierna una persona que sabe leer los documentos académicos. Se trata de un fuerte contraste tanto de edad como de perspectiva. La potencialidad de Etiopía me recuerda a los primeros días de Singapur como país independiente y a la sabiduría y el criterio que se empleaba en el crecimiento y la gestión de ese país. Y pienso que se puede hacer exactamente lo mismo con una ayuda aquí y allá de forma que se beneficie el mayor número posible de personas.
Nuevas Horizontes
Tenemos mucho entusiasmo y hemos invertido en todo, como en la identidad. El equipo de PRISM es nuestra puerta de entrada a la identidad y cuenta con más de una docena de personas. Este equipo se ha ampliado con 30 personas y con nuestra capacidad para licitar y pedir contratos. Queríamos sellar primero algunos contratos emblemáticos, y esos están llegando a su fin, lo que llevará a Cardano, millones de personas. Luego se consolidarán como una base desde la que podremos hacer negocios con docenas de entidades y países, tanto públicos como privados. Y los responsables de esto están ampliando muy rápidamente para formar a muchos más desarrolladores, para formar a muchos más empresarios, y luego dar a esos empresarios acceso a los mercados y al capital para que puedan liquidar la riqueza de África y beneficiarse de ella. Mucha gente tiende a ver esto como un problema de caridad. Pienso que esa es la manera equivocada y también fundamentalmente deshumanizadora.
Considero que se trata, en definitiva, de un nuevo mercado, una nueva frontera en la que podemos encontrar nuevos socios con los que trabajar. Nuestro objetivo no es salvar a la gente ni regalar nada. Nuestro objetivo es crear socios, colaborar y crear riqueza, y compartirla con nuestros socios. Me cuesta imaginar lo que significa nacer en Zambia, en Zimbabue o en Sudáfrica. No es mi vida ni mi experiencia, aunque hay millones de personas que tienen esa vida y esa experiencia. Lo que sí puedo imaginar es cómo construir un gran negocio con personas nacidas en esos lugares y que construyamos riqueza juntos. Eso es lo que ofrece la tecnología blockchain. Es un gran integrador. Un gran motor de confianza. Es un gran motor de progreso y creación económica. Sin permiso, sin ayuda del gobierno y sin coordinación centralizada, los emprendedores de blockchain hemos construido un ecosistema con un valor de 1 billón de dólares, mirando la capitalización del mercado de criptomonedas como Bitcoin y Ethereum y Cardano y otras, y eso es sólo en 10 años de juego.
Multiplicando las oportunidades
Nosotros impulsamos también un movimiento con decenas de millones de personas en todo el planeta, desde nómadas y mongoles hasta pastores en Senegal. Todo ellos pueden dirigir toda su vida desde un teléfono móvil sin depender de un organismo central. Y en los próximos 10 años, se puede producir un crecimiento de otro orden de magnitud y la totalidad de nuestro ecosistema podría ser de 10 billones de dólares, 15 billones de dólares, 20 billones de dólares. La mayor parte podría pertenecer a los países en desarrollo, como Etiopía, Uganda o Chile, y podría ser el mayor logro de los sistemas en el último siglo, mejorando la vida de todos y reduciendo los problemas de todos. Es muy emocionante estar aquí. Es estupendo formar parte de estos eventos y ver el despliegue en un periodo de tiempo muy corto.
Anunciaremos que nuestra empresa se centrará en África, y mostraremos a todo el mundo los diferentes programas y pilotos y proyectos y socios, y la visión de en qué vamos a invertir en los próximos tres a cinco años. Como empresario, es un privilegio poder participar en estos mercados de esta manera. Todos los días, literalmente, me levanto y hablo con las personas más ambiciosas, honestas y trabajadoras que he conocido en mi vida y encuentro formas de construir sistemas con ellos que no sólo mejoran sus vidas, sino que producen riqueza para todos nosotros. Y si estoy en lo cierto en mi hipótesis, considero que África hará que el milagro chino del que hemos sido testigos en las últimas tres décadas se convierta en el milagro africano, que eclipsará cualquier cosa que haya logrado China y quizás convierta a África en uno de los continentes más valiosos de la historia de la humanidad.
Un lugar en la mesa
Ya ocurrió antes con el gran Mansa Musa ⁴, y definitivamente creo en que puede volver a ocurrir, si creamos los sistemas adecuados. Sería una parodia que esos sistemas permitieran que esa riqueza se acumulara sólo en un lugar. A mi juicio, es sumamente importante que recordemos el primer principio del espacio de las criptomonedas, que todos somos realmente iguales y que no hay un poder centralizado.
Lo mágico de los sistemas que construimos y diseñamos es que todo el mundo tiene voz, no importa de dónde vengan o quiénes sean. Y todo el mundo tiene un lugar en la mesa para poder decidir la trayectoria de su vida y quedarse con los frutos de su trabajo. De modo que muchas gracias por venir, y espero que disfruten de esta conferencia tanto como yo, y espero que decidan invertir en África tanto como yo lo he hecho. Considero que es la mejor inversión que puede hacer cualquier empresa. Asimismo, creo que es el trabajo más gratificante que cualquier persona puede hacer.
Notas del Traductor
¹ KIVA se autodescribe como una organización internacional sin fines de lucro, fundada en 2005 en San Francisco, con la misión de ampliar el acceso financiero para ayudar a las comunidades desatendidas a prosperar. Mediante la financiación colectiva de préstamos y la liberación de capital para los desatendidos, mejorando la calidad y el costo de los servicios financieros y abordando las barreras subyacentes al acceso financiero en todo el mundo. A través del trabajo de Kiva, los estudiantes pueden pagar la matrícula, las mujeres pueden iniciar negocios, los agricultores pueden invertir en equipos y las familias pueden pagar la atención de emergencia necesaria. El 100% de cada dólar que se presta en Kiva se destina a financiar préstamos.
² Muhammad Yunus: es un emprendedor social, banquero, economista y líder social bangladesí condecorado con el Premio Nobel de la Paz por desarrollar el Banco Grameen y ser el desarrollador de los conceptos de microcrédito y microfinanzas. Estos créditos son otorgados a emprendedores que son muy pobres para calificar a un crédito en un banco tradicional. En 2006, Yunus y el Banco Grameen fueron condecorados con el Premio Nobel de la Paz “por sus esfuerzos para incentivar el desarrollo social y económico desde abajo”. El Comité Noruego Nobel hizo notar que “la paz duradera no puede ser alcanzada a menos que grandes grupos de la población encuentren formas en las que puedan salir de la pobreza” y que "a través de culturas y civilizaciones, Yunus y el Banco Grameen han demostrado que hasta los más pobres de entre los pobres pueden trabajar para su propio desarrollo. Yunus ha recibido varios honores tanto nacionales como internacionales. Recibiendo por parte de los Estados Unidos la Medalla Presidencial de la Libertad en 2009 y la Medalla Dorada del Congreso en 2010.
³ MOOC: Acrónimo en inglés de Massive Open Online Course, esto es cursos en línea masivos y abiertos son una modalidad de aprendizaje en línea que está teniendo auge a nivel mundial dirigidos a un número ilimitado de participantes a través de Internet según el principio de educación abierta y masiva.
⁴ Mansa Musa fue el gobernante más rico de su tiempo y es la persona más rica de todos los tiempos si se ajusta su patrimonio por la inflación, el décimo mansa, traducido como “rey de reyes” o “emperador”, del Imperio de Malí. En la época de su ascenso al trono, el Imperio de Malí ocupaba el territorio previamente gobernado por el Imperio de Ghana, así como el Mande (Malí) y sus áreas inmediatamente próximas. Musa tuvo multitud de títulos, entre ellos los de emir del Manding, señor de las Minas de Wangara y conquistador de Ghanata, Futa-Jallon y al menos una docena de estados.