Desde hace tiempo, internet depende de los servicios de nombres de dominio (DNS) para traducir las direcciones IP numéricas aleatorias en nombres de sitios web más sencillos y legibles, como los que suelen utilizar los internautas.
Se trata de piezas fundamentales de la infraestructura que conectan el mundo de las máquinas (que gestionan internet a través de números que representan direcciones IP) y el de los humanos (que pueden recordar palabras con más facilidad que una cadena aleatoria de números), lo que permite a los internautas humanos navegar por la red de forma más sencilla.
No obstante, este sistema también presenta algunos inconvenientes importantes.
Tales problemas han llevado a los desarrolladores a buscar formas de eludir la necesidad del DNS y crear una solución alternativa más eficaz. En este artículo exploraremos estos inconvenientes del DNS y explicaremos cómo el uso de la tecnología blockchain para la gestión descentralizada de identidades puede resolver potencialmente estos problemas.
Inconvenientes de los servicios de nombres de dominio (DNS)
El DNS es una tecnología compleja que también es vulnerable a los ataques. Estos casos han tenido importantes implicaciones para las empresas y los usuarios. Nos centraremos en dos ejemplos principales.
Un DNS es un registro centralizado que empareja direcciones IP con palabras legibles. En muchos casos, las extensiones de los dominios están bajo el control de países que utilizan su autoridad centralizada para bloquear sitios según sus intereses.
A modo de ejemplo, una web popular con sede en una jurisdicción y con seguidores en todo el mundo puede ser cerrada por las autoridades de otra jurisdicción en función de sus valoraciones. Dicho proceso puede impedir que los usuarios de esa jurisdicción accedan a ese sitio web, independientemente de su legalidad en otras jurisdicciones. El proceso y el razonamiento para cerrar un sitio web popular también pueden ser opacos y tratarse de una decisión unilateral que no tiene en cuenta las opiniones de los usuarios.
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Cualquier persona u organización que opere un sitio web utilizando un DNS puede ser potencialmente objetivo de países fuera de sus jurisdicciones sin mucho recurso que interponer.
Los servicios DNS también pueden sufrir interrupciones y dejar de convertir los nombres de dominio en direcciones IP. Esto puede ser un problema grave, ya que el resultado es que los sitios web pueden quedar inaccesibles sin ser culpa de quienes los mantienen y los usuarios no pueden acceder a los servicios del sitio web.
Se han dado casos de sitios web mundiales populares que han sufrido una interrupción del DNS y han causado molestias a sus usuarios en el proceso. Además, hoy en día, muchos servicios relacionados están conectados a través de una plataforma central o sitio web en el que los usuarios pueden registrarse. Un corte de DNS del servicio de la plataforma central podría inutilizar todos esos servicios relacionados. Esto puede crear un efecto cascada que deje fuera de servicio partes de Internet debido a un error de configuración de sus protocolos DNS.
Cómo las soluciones de identidad descentralizadas resuelven potencialmente estos problemas
Los identificadores descentralizados (DID) son una tecnología que puede sustituir al DNS tradicional y se utiliza en una solución de identidad descentralizada que aprovecha la tecnología blockchain descentralizada. Un DID suele referirse a un documento en el que se registran los datos y se puede demostrar que son correctos. Un DID puede ofrecer:
- una marca de tiempo de cuándo fue creado
- una prueba criptográfica de que el documento DID es válido
- una lista de claves públicas criptográficas
- una lista de formas en que el DID puede utilizarse para autenticar
- una lista de servicios en los que puede utilizarse el DID
- cualquier número de extensiones definidas externamente
Mediante este DID se puede registrar la relación entre un nombre de dominio y una dirección IP.
Se mantiene el registro en un ledger blockchain descentralizado que más tarde puede utilizarse como archivo de todos los DID creados. Además, se puede utilizar un NFT para representar un DID y este tokens sería necesario cada vez que alguien quiera editar la información contenida en el registro.
De este modo, anclando las ediciones de un DID a un ledger distribuido como Cardano, un usuario puede ofrecer el historial de ediciones realizadas en el documento al que hace referencia el DID. Así se crea un archivo descentralizado que puede preservar la integridad de los datos sin una autoridad central.
Tampoco estaría alojado en ningún registro centralizado. Un intermediario no podría bloquear uno de estos dominios bajo la presión de un actor extranjero. Los resolutores que cambian el nombre de un sitio web por una dirección IP también funcionarían sobre la blockchain, lo que significa que los errores podrían resolverse rápidamente.
Los dominios digitales [DID] cambian radicalmente la arquitectura de Internet. Tiene el potencial de transformarla en algo más parecido a una red de comunicaciones que no está bajo el control de ningún actor central.
A través de los DID, los usuarios pueden ser potencialmente menos vulnerables a la censura de DNS y a las interrupciones.
Cardano Connect (CNS)
El objetivo de CNS es ofrecer este tipo de solución de identidad descentralizada en Cardano, en primer lugar para las interacciones sociales y las transacciones que implican aplicaciones descentralizadas de Cardano. Para ello, gestiona los nombres de dominio mediante los NFT de Cardano, ofreciendo una forma descentralizada de probar y gestionar la propia identidad dentro del ecosistema de dApps de Cardano. Estos se registran en el ledger distribuido de Cardano y su acceso y venta se controlan a través de los NFT.
El CNS también dispone de un resolver que puede tomar la información de los metadatos del NFT y traducirla. Esto significa que el acceso a los dominios también está descentralizado, a diferencia del modelo DNS actual.
En última instancia, un usuario con un CNS personalizado no es vulnerable a un corte del DNS o a la censura de un intermediario. El CNS elegido está unido y bajo el control del usuario y almacenado a través del NFT que puede gestionarse a través de su wallet de Cardano autocustodiado. Esto significa que un usuario de Cardano con un CNS puede utilizar esta dirección legible para enviar a otros para realizar transacciones y gestionar su reputación en el ecosistema de Cardano, todo ello por sí mismo a través del NFT de Cardano que almacena su información.
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Traducción al español de “How Decentralized Identity Solutions Can Fix the Internet”, escrito por @EMURGO_io, en marzo 12 de 2024.
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